martes, 14 de enero de 2014

Carta 1/12/10: Memorando con relación al Sistema de Fondos guardados (México)



El país donde tengo mayor número de lectores es México, y poco a poco más colaboradores de ese país se suman para dar a conocer cómo se están llevando las cosas allá. Para mí es un agrado crear entradas directamente relacionadas con este país, uno de los que tiene mayor número de TJs. 

Pues bien, esta carta revela cómo funciona el Sistema de Fondos de Depósito en México y América Central, (llamado allá "Fondos Guardados"). Ya tratamos cómo funciona este sistema en USA, Chile y Venezuela en esta entrada: http://hildeydesa.blogspot.com/2013/12/preguntas-frecuentes-sobre-la.html

Decidí abrir una entrada aparte para el sistema de México, porque presenta muchas peculiaridades. De hecho, esta carta no es una copia de la de USA, sino que es autóctona de esta sucursal que actualmente atiende también la América Central, aunque sigue los lineamientos de aquella.

Las cartas de México que he podido ver no tienen la clásica "Referencia" ni tampoco el saludo: "Queridos Hermanos"... siendo un caso único de redacción, no sólo de las sucursales iberoamericanas, sino a nivel mundial. En vez del saludo cristiano, leemos "Memorando", una palabra más propia del mundo de los negocios que de una misiva pastoral. De hecho, "memorando" es "aquel escrito que se usa para intercambiar información entre diferentes departamentos de una empresa, con el propósito de dar a conocer alguna recomendación, indicación, instrucción, disposición, etc."

Para contrarrestar el tono empresarial del encabezado (¡qué más encima alude a fondos!), la carta comienza con la cita bíblica de la "igualación", que no aparece en la carta  de la sucursal de USA que trata el mismo tema. Sin embargo, no se deja claro cómo el Sistema de Fondos Guardados "aplica este principio". Pablo, cuando habla de la "igualación", se refiere a una contribución para los hermanos pobres de Judea... beneficiados directamente con el "sobrante" contribuido por los corintios para sus carencias físicas. Que las congregaciones regalen sus intereses a una multinacional que no se los devolverá o repartirá de manera alguna, sino que los usará para especulaciones financieras, nada tiene que ver con el pasaje de 2 Corintios. La cita bíblica no es más que una mera introducción piadosa al tema que quieren tratar, al que pasan de inmediato y una vez hecho esto, resurge el tono empresarial: Se señala que el sistema lleva "algunos años" andando, pero que "un pequeño porcentaje de las congregaciones" lo utiliza. En México, (¡y aquí dan cifras con 2 decimales!) "sólo el 28, 35%" lo usa. (Para 2008 apenas el 10% de las congregaciones de USA lo usaba...)

Al discurrir por la carta, notamos también cuán efectivo puede ser que una misma sucursal atienda varios países con diversas legislaciones. Aunque en América Central la sucursal recomienda usar "cuentas con cheques" (en USA y en otros países es la instrucción "para todas las congregaciones"), en México y Panamá no lo promueve "por razones fiscales" (de abrirlas  en estos dos países, no debe hacerse "a nombre de la organización"). Llegado a este punto, la carta de México converge con la de otros países en esta materia: Independiente del tipo de cuenta escogida por la congregación, y que incluso no paguen intereses sino que los reciban, se llega a la conclusión que "generan pocos intereses, si acaso alguno". La carta de USA dice en paralelo: "Aún en el mejor de los casos, los intereses que cada congregación puede obtener por su cuenta son muy limitados". 

Después de leer toda esta argumentación, un cuerpo de ancianos standard, tiene la mente preparada para oír la conclusión "lógica" (que desean los autores de la carta a que lleguen los ancianos): "aprovechar el sistema de fondos guardados en la sucursal". O, como dice la carta de USA: "pensar seriamente en  las ventajas dejar fondos en depósito en la cuenta abierta con la sucursal". 

A continuación, la sucursal de México nos sorprende: no sólo ofrece este fondo a las congregaciones, sino también "a los circuitos, Salones de Asambleas", incluso, como se lee más adelante, ¡"a los Comités de Mantenimiento de Salones del Reino"! Esto lo dicen como si fuera decisión propia: "Hemos decidido".  Sin embargo, en la carta a USA aunque se mencionan los Comités de Mantenimiento, no dice: "Hemos decidido", como si fueran los mismísimos apóstoles reunidos en concilio...  En la carta de Venezuela se dice expresamente que los Comités de Mantenimiento, "por ahora, no podrán llevar con la sucursal la cuenta bancaria". Evidentemente, la sucursal de México es la más ambiciosa de todas: Lo quiere TODO: administrar los fondos hasta de los circuitos, cosa que va en detrimento de los SC, pero sin duda mucho más lucrativo que administrar los fondos de las congregaciones. 

Para que no se piense en los tremendos beneficios que tendría la sucursal de México al administrar TODOS los fondos de todas las congregaciones, Salones de Asamblea, circuitos y Comités de Mantenimiento de México y América Central (lo que de hacerse efectivo la convertiría en una de las sucursales más ricas del mundo), la carta da a conocer las ventajas de utilizar los fondos guardados: tener una sola cuenta y ganar más intereses... pero esta última ventaja no es para las congregaciones sino para la sucursal, pues "los fondos que obtuviera la sucursal estarían disponibles para el adelanto de los intereses del Reino, a nivel local o mundial". Se dice que los fondos que no participan de este sistema son "improductivos", pero, ¿para quién? Las congregaciones ganan sus intereses, modestos, pero para sus propias necesidades, para sus desvalidos, si los fondos se utilizan bien. ¿Acudirá la sucursal con dinero para ayudar a los pobres de las congregaciones? Los cuerpos de ancianos saben la respuesta...

La carta de USA corre en este punto en paralelo también. Habla de las mismas 2 ventajas de usar el sistema, sólo que dice que los intereses ganados, van a algo más específico que "los intereses del Reino" de la carta de México: "se destinarían a la construcción de Salones del Reino en países con recursos limitados o a pagar otros gastos de mantenimiento necesarios". La verdad es que es bastante nebuloso en ambas cartas el fin con que se usan dichos intereses ganados con el dinero de todos... Las cartas no declaran el mismo destino para dineros obtenidos con el mismo sistema. Tampoco se señala alguna forma de rendición de cuentas y curiosamente, ambas cartas dejan entrever la posibilidad de que los dineros se vayan al extranjero... lo que demuestra que las congregaciones no tienen ningún beneficio real de participar en este sistema. "No debes poner bozal al toro mientras trilla", dice la Biblia. Sin embargo, eso es exactamente lo que hacen, sobre todo en países como México y los de América Central, tan carentes de todo, al obtener capitales desde los más desposeídos sin ofrecerles ninguna clase de participación en los réditos. 

Por otro lado, a fin de hacer más expedito este sistema y promover su utilización, se señala que para hacer depósitos o retiros, ya no son necesarias resoluciones, salvo para adherirse al sistema, o para hacer donaciones de fondos guardados. Este párrafo es el único calcado 100% de la carta de USA. 

Finalmente, se dan las instrucciones burocráticas respecto a cómo hacer la remesa y el papeleo correspondiente a través de jw.org Curioso es que para fecha tan tardía como el año 2010 jw.org no estuviera disponible todavía en América Central, ¡habiendo ya cerrado sus sucursales! Este hecho, hacía bastante engorroso el retiro de estos fondos requiriendo una carta firmada por 2 ancianos vía e-mail. 

La despedida se parece mucho a la de la carta de USA: La bendición de Jehová se invoca sobre los diligentes que cuiden "de los bienes del Amo" y se cita el mismo texto. El "amor cristiano" que envía la sucursal de USA es además "afectuoso" en la otra carta. La carta de USA sólo se envía con copia a los SC. La de México se envía además a los Salones de Asamblea, para promover más todavía este sistema. Sin duda, en México no les gusta sencillamente copiar exactamente las cartas... sino que ponen de su propia cosecha...

Al leer todo esto cuidadosamente, ¿se puede seguir sosteniendo que este sistema de capitalización va en beneficio de las congregaciones?




3 comentarios:

  1. Bueno. En Mexico eso es nuevo, pero en España hace muchos años que funciona ese sistema. Los fondos de todas las congregaciones y de los circuitos y distritos están en una cuenta a nombre de Testigos Cristianos de Jehová con sede en Ajalvir. <Ninguna congregación tiene cuenta a su nombre ni a nombre del cuerpo de ancianos como era antes.

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  2. Testigo de He man17 de enero de 2014, 1:58

    Como la carta es de 2010, en ese momento aplicaba un impuesto llamado "IDE" Impuesto a los depósitos en efectivo, que pretendía ser un cobro a la informalidad (dinero negro, dicen en España) y que era del 2% y después pasó al 3%.
    Dicho impuesto era retenido por el banco el día último del mes del excedente de $15,000 pesos sobre los depósitos en efectivo (US$1200- EUR 900)
    Y ya que las donaciones se hacen en su mayoría en efectivo, ese 3% aunque es acreditable contra el ISR Impuesto Sobre la Renta, como la Wash Tower no declara impuestos, no podían pedir devolución, compensación o acreditamiento.
    Y se ve que les interesa el dinero y no quieren dar ni un peso.

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  3. El Cuerpo Gobernante, dice: "Somos todo para con todos".

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